Completados, un fin de semana más, los partidos de los equipos de cantera del CD Limsama. Balance de dos triunfos y una derrota. La alegría cayó del lado tanto del Juvenil Provincial como del División de Honor. El primero goleó al Playas Rincón de la Victoria en Cártama (12-1) y el segundo ganó en Gamarra (2-5). La nota negativa fue el traspié del Filial en la cancha del CD Belmez Atlético. Al Cadete Autonómico le tocó descansar y no tuvo que afrontar ningún envite liguero.

El Juvenil Provincial empezó la jornada en la tarde del viernes 8 de marzo en Cártama. Lo hizo con un duelo ante el Playas Rincón de la Victoria en que exhibió una pegada letal. Los chicos de Salvador Rodríguez están trabajando a un gran nivel y, partido tras partido, compiten con confianza y sustentan sus resultados en una sólida defensa y en una ofensiva muy precisa. En esta ocasión volvió a quedar patente sobre el 40x20. La victoria se encarriló pronto con dos goles, al descanso la ventaja fue de tres dianas (4-1) y, en la conclusión, el luminoso reflejó un contundente 12-1.

La alegría del triunfo ha aportado impulso al Juvenil División de Honor. El 5-0, de la semana pasada con el CD El Ejido FS, le ha permitido al equipo de Carlos Arriaza recuperar su carácter competitivo y sacar su mejor versión en la visita a Gamarra, otra de las pistas complicadas de su categoría. Se sintió cómodo con la posesión de balón y generó muchísimas ocasiones en área rival. Se adelantó en el electrónico (0-2) y, ya en la segunda mitad, el 1-3 obligó al cuadro local a utilizar el ataque de cinco con portero-jugador y una buena defensa permitió sentenciar la contienda (2-5).

Por último, el Filial de 3ª División frenó su marcha ascendente en las últimas jornadas y que le había permitido presentar una firme candidatura a disputar el play-off de ascenso, pero no perdió en la cancha del CD Belmez Atlético por un ajustado 3-2. Francisco Inza, en este encuentro, contó con la dificultad de configurar la convocatoria por tema de lesiones y recurrió a dos juveniles para disponer, al menos, de dos cuartetos de juego más los porteros. Las imprecisiones en defensa, en momentos concretos, fueron aprovechadas por la escuadra anfitriona para tomar ventaja en el marcador y conservarla hasta el final eliminando cualquier opción de sumar algún punto.