La orquesta del BeSoccer CD UMA Antequera creó una sinfonía triunfal en sus primeras actuaciones sobre el escenario de la máxima categoría del fútbol sala nacional. El paso de las fechas en el calendario no le sentó nada bien y empezaron a producirse pequeños desajustes grupales y el sonido perdió la calidad inicial. Sin demasiado acierto realizó un trabajo duro por regresar al punto de partida. Aún quedan posibilidades de arreglar el resultado final en las últimas cinco oportunidades de exhibir un rendimiento magistral y cautivar a un público fiel. Uno de los artífices de no bajar la guardia nunca e intentar agotar todas las soluciones de mejoría resulta ser un peso pesado del grupo: Miguel Conde Toscano. El jugador malagueño, en su séptimo curso vistiendo la elástica verde, asumió la responsabilidad de ser el director encargado de animar en todo momento a sus compañeros  y convertirse en el mejor ejemplo de profesionalidad.

En el deporte al máximo nivel, las individualidades fortalecen los bloques más unidos. En la entidad universitaria uno de los puntos fuertes es competir de forma conjunta hasta el final sin bajar los brazos ni abandonar la bandera del juego limpio. Miguel Conde entendió esa filosofía y la puso en práctica desde el principio. La campaña anterior destacó como un jugador total capaz de abarcar todos los espacios del 40x20. Se fajó en defensa y brilló en ataque con 25 goles. En su segunda opción de competir en la élite no bajó el pistón agarrándose a una regularidad admirable. En la faceta goleadora destaca con 14 tantos en 25 encuentros y exhibe valentía, compromiso y entrega a la hora de cumplir cualquier cometido indicado por el cuerpo técnico. Ante la falta de victorias, el juego del 5 alumbra la oscuridad que produce la posición de colista.  

Una situación tan compleja en la clasificación también genera reacciones en el vestuario. La más efectiva es hacer autocrítica. “No nos encontramos en una dinámica muy positiva. Creo que estamos en el peor momento del curso. Son muchos resultados adversos los que hemos cosechado de manera consecutiva. Partidos en los que en teoría deberíamos haber sumado algún punto, se nos han complicado y hemos terminado perdiéndolos. No quiero ser pesimista. Debemos afrontar el próximo encuentro con la máxima ilusión y ganas posibles y ser profesionales. Queremos seguir sumando puntos de aquí a final de temporada y no vamos a perder la cara en ningún momento. Nosotros vamos a preparar este choque con entusiasmo y vamos a ir este viernes a tope. ¿Por qué no vamos a puntuar? Por supuesto que sí. Nos quedan tres jornadas en casa y vamos a hacer de nuestro Pabellón un fortín e intentar conseguir los nueve puntos que nos faltan”, resalta el cierre de Cuevas del Becerro.

Ante la visita este viernes 22 de marzo, a las 20.45 horas, de Aspil Vidal Ribera Navarra al Argüelles, Miguel Conde recuerda el precedente de la primera vuelta. “En Tudela creo que hicimos una de las mejores primeras partes de la temporada. No concedimos apenas ocasiones, estuvimos poco acertados de cara a puerta, pero el partido estuvo muy igualado. Cualquiera de los dos se pudo llevar la victoria. Los pequeños errores siempre nos condenan y ese encuentro no fue una excepción. Al empezar el segundo tiempo, en un balón tonto que perdemos, nos marcan un gol y nos cuesta el choque. Este equipo de Aspil juega de memoria, ocupa todos los espacios, sabe cómo sacarte de quicio, porque tocan y no pierden la bola. Nos van a poner las cosas muy difíciles. Una de las claves sería una defensa en media pista muy constante para que no vean huecos y pillar algún contraataque para marcar. La efectividad va a marcar el duelo. Si somos capaces de enganchar un par de jugadas con gol,  podemos sacar los tres puntos”, indica.

Muchas razones invitan a los profesionales a superarse cada día sin dejarse vencer por la derrota. El ejemplo más claro queda reflejado en las palabras del capitán del BeSoccer CD UMA Antequera que asumió dicha responsabilidad a raíz del anuncio de Crispi de dar un paso atrás a nivel competitivo por incompatibilidad laboral. “Nuestra afición es de las pocas cosas positivas que sacamos de esta campaña. La ciudad de Antequera se ha volcado con nosotros, siempre hay muy buena entrada en el Pabellón y están sin parar de animarnos. Aunque hemos perdido muchos partidos en casa, cuando acabamos están animándonos y apoyándonos y no tenemos nada que reprocharles. Al contrario, debemos dejarnos la vida por ellos, por todos los aficionados que vienen con nosotros y seguro que disfrutarán con una victoria más que nosotros mismos”, acentúa Miguel.