Todo o nada. Cara o cruz. Resistir o caer. 40 minutos, en la pista del Pabellón de Amate, pueden mantener o sacar al BeSoccer CD UMA Antequera de la guerra por la permanencia en 1ª División. Necesita el refuerzo de los tres puntos para continuar dependiendo de sí mismo.  La batalla con el Real Betis FS se antoja crucial por lo apretada que está la clasificación en la parte baja. El plantel de José Antonio Borrego “Tete”, con 25 puntos en su casillero, se enfrenta al Real Betis que lo tiene justo por delante de la tabla con 27. Una victoria le permite abandonar los puestos de descenso tras caer en ellos, por primera vez, la pasada semana con el empate con el Levante UD FS (3-3) y llegar a la última jornada, en el Argüelles, con las opciones intactas de cumplir el objetivo de esta temporada. Lo que no sea ganar, supondría mirar otros resultados de una jornada que se celebra de forma íntegra el sábado 13 de mayo y en horario unificado (18.30 horas).

La racha sin ganar de verdiblancos y antequeranos es muy similar y, por ello, ambos se juegan su futuro en la máxima categoría a falta de dos jornadas para la conclusión de campeonato liguero. El destino de uno u otro quedará marcado al término de un emocionante derbi andaluz. El conjunto anfitrión cuenta con la ventaja de tener el apoyo de su afición, mientras que el visitante está repleto de ilusión y ganas por conseguir un premio deportivo que se le ha resistido en sus anteriores tres etapas en la élite del fútbol sala nacional. En la primera vuelta, el duelo disputado en el Pabellón Fernando Argüelles fue muy igualado que se decidió por un ajustado 2-3. Pablo Ordóñez marcó muy rápido el 1-0 y luego anotaron Piqueras, Raúl Jiménez y Aitor. Pablo Ramírez, que ya no viste la elástica verde, recortó distancias y hubo ocasiones hasta el final con el ataque de cinco con portero-jugador. Una referencia muy lejana dado que se espera otro encuentro totalmente distinto dado la importancia de la victoria.

La última victoria del Betis y el cuadro universitario se produjo en la misma jornada, en la número 20. El primero en casa frente al Córdoba Patrimonio de la Humanidad (4-3) y el segundo en la cancha de Manzanares (4-5). Unas semanas más tarde y, con la competición a punto de finalizar, la pugna por este botín se antoja feroz. El empate en tierras valencianas, tras un 3-0 en contra, debe servir tanto de aviso como de motivación para rendir al máximo de principio a fin. “Una final para nosotros. Ya no tenemos el colchón que antes sí teníamos. Estamos en descenso, es una realidad, y tenemos que ir con todo a Sevilla. Jugamos contra un rival que tenemos a dos puntos y, si somos capaces de ganar, cambiaremos la posición con ellos. Cuenta con la ventaja de su afición y de que le vale el empate. Debemos ir a por el envite, a no especular e intentar vencer para seguir dependiendo de nosotros. Está en nuestra mano conseguir el objetivo que es la permanencia”, indica Tete

La formación verde encara con optimismo el desenlace de la campaña. El tramo inicial fue espectacular con una histórica clasificación a la Copa de España y, en la segunda, no han salido las cosas como le hubiera gustado y, aún así, no pierde las ganas de hacer un esfuerzo extra. Ya demostró la pasada semana que no va a bajar los brazos ni se va a rendir. “Es la primera vez que caemos en descenso. Ha sido ahora y hay que ser fuertes. El equipo no estuvo fino en la primera parte con Levante, pero tuvo una capacidad de reacción espectacular y, cuando peor lo teníamos, fuimos capaces de empatar e incluso pudimos ganar. La pena fue que ese punto no nos sirvió al vencer el otro equipo implicado con nosotros. De todas formas, el resultado nos debe ayudar a cambiar la dinámica que llevábamos de tantas derrotas e ir a Sevilla a por el triunfo”, puntualiza.

El entrenador del conjunto antequerano dispone de todos sus guerreros para la contienda más importante. La semana de entrenamiento se ha completado con normalidad y, con todos los posibles escenarios que puede haber según trascurra la jornada, el mensaje es claro y contundente. “Mantenerse en Primera División, en fútbol sala, es muy difícil. Estamos luchando por ello, pero lo importante es que dependemos de nosotros. Es una final con un rival que también se juega mucho y sabe que si pierde, se mete en problemas. Mis jugadores están preparados y capacitados para traernos los tres puntos que nos ayudarían mucho a salir de la zona de peligro. Si se gana no nos vamos a salvar y hay que jugar el último envite, sin embargo, si se pierde y se dan otros resultados, es posible que ya no tengamos opciones. No podemos especular y estamos listos para ganar en Amate”.